鈥溌贸mo pasa el tiempo!鈥 se ha convertido en una frase bastante com煤n para m铆 en las 煤ltimas semanas. En un lapso de pocos d铆as se cumplen varios aniversarios importantes en mi vida y al estarlos recordando y ver las im谩genes en las redes sociales me ha dado nostalgia y me ha hecho darme cuenta de lo r谩pido que se ha pasado el tiempo. Me sorprende que algunos eventos de los que recuerdo como si hubieran pasado recientemente, en realidad sucedieron hace ya bastantes a帽os. Por ejemplo, me reun铆 con algunos excompa帽eros de la secundaria a los que ten铆a m谩s de treinta a帽os que no los ve铆a. Fue sorprendente la manera en la que relat谩bamos an茅cdotas de los 鈥渂uenos tiempos鈥 y nos pon铆amos al corriente de lo que hab铆a pasado en nuestras vidas desde la 煤ltima vez que nos hab铆amos visto. El tiempo pasa, pero algunos recuerdos perduran para siempre.

Algo importante de nuestros recuerdos es que, si bien en la mayor铆a de las ocasiones no podemos recordar las palabras espec铆ficas de las personas, s铆 podemos recordar con gran claridad la manera en la que nos sent铆amos cuando est谩bamos con ellas. No recordamos lo que nos dijeron, pero s铆 c贸mo nos hicieron sentir en un momento espec铆fico. Tambi茅n conservamos un recuerdo de la manera de ser de una persona. Con el tiempo olvidamos muchas cosas, pero siempre conservamos una imagen del car谩cter de una persona con la que convivimos.

De alguna manera, las personas son como los perfumes. Mis hermanos son 谩vidos entusiastas de los perfumes y cuando estoy con ellos me dan a conocer las nuevas fragancias que est谩n de moda. Hay una infinidad de perfumes debido a la gran cantidad de ingredientes y posibles combinaciones. Por esta raz贸n, cada perfume es singular y 煤nico. Una caracter铆stica de un buen perfume es su olor perdura por mucho tiempo. De la misma manera, cada persona es 煤nica y su car谩cter es evidente a todos los que est谩n a su alrededor. El olor o personalidad de alguien se queda en nuestra memoria por mucho tiempo.

Como seguidores de Cristo, es nuestra vida la que deja huella en los dem谩s. Nuestro car谩cter, y no nuestras palabras, es lo que las personas recuerdan de nuestro testimonio cristiano. El ap贸stol Pablo describe en 2 Corintios 2:14 esta realidad de esta manera:

鈥淢as a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jes煤s, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento鈥.

Dios en su infinita gracia nos usa como portadores del conocimiento de Cristo. El olor de Cristo debe ser tan evidente en nosotros que los dem谩s al recordarnos, deber铆an de recordar a Cristo. La palabra cristiano significa un Cristo peque帽o y esto es precisamente lo que debemos de ser. Somos para los dem谩s el rostro, los pies, y las manos de Jes煤s.

El olfato es un sentido muy poderoso y uno que est谩 ligado a nuestra memoria. Los olores nos traen recuerdos y nos ayudan a relacionar eventos y personas. Con el tiempo muy pocos se acordar谩n de nuestras palabras, pero s铆 prevalecer谩 el olor de nuestro car谩cter. 驴Cu谩l es su olor? Lo invito a que con la ayuda del Esp铆ritu Santo podamos oler m谩s a Cristo en todo lo que somos y hacemos.

y otros recursos est谩n disponibles en y https://octavioesqueda.com/en/ (English) and (别蝉辫补帽辞濒).